El estrés en el entorno laboral, la carga excesiva de trabajo o el ritmo de vida frenético afecta a todos los ámbitos de tu vida. Empieza en el trabajo, pero sigue en casa y afecta a tu salud. El estrés acumulado provoca una sensación extra de nervios y este agobio termina pasando factura. Puede influir, de manera directa, en tu productividad. Existe una serie de hábitos que impiden tu productividad y hace que te sea complicado lograr tus objetivos.
Hábitos a evitar que afectan a tu productividad
Tener un estresante ritmo de trabajo te puede llevar a estar horas y horas delante de una pantalla sin éxito. Por eso, para evitar esta situación y lograr que tus horas frente al ordenador sean lo más productivas posibles, te dejamos una lista de hábitos a evitar.
- Realizar muchas tareas a la vez. Seguramente te sientas muy orgulloso por ser un trabajador multitarea. Esta suele ser una característica muy apreciada entre los profesionales. Sin embargo, evita que puedas centrarte únicamente en una tarea y, por tanto, es muy posible que termines cometiendo errores y realices actividades poco eficientes. Evita distracciones y céntrate en un solo proyecto. Cada cosa a su tiempo.
- Negatividad. Tener una actitud negativa ante las tareas y estar constantemente quejándote no va a hacer que tu día vaya a mejor, sino todo lo contrario. Es muy probable que el ánimo general de tu equipo y de tu entorno sea peor con una actitud negativa. El positivismo y las buenas maneras generarán un buen ambiente que te ayudará a ser más productivo.
- No hacer descansos. Tener ratos libres es fundamental para ser productivo en tus horas de trabajo. Descansar es fundamental para conseguir tener la concentración al máximo. Por más tiempo que pases delante de una tarea no vas a mejorar el resultado. A veces es mucho mejor dejar un pequeño respiro y ver las cosas con perspectiva. De esta forma, sabrás que las horas trabajadas son realmente productivas.
- Aprende a decir que no. Si bien es cierto que es recomendable que nuestro jefe confíe en nosotros y esté contento con nuestro trabajo, hay profesionales que sacrifican sus horas libres para complacer a su superior. Tienes que establecer un orden de prioridades y aprender a decir que no. Muchas veces, decir que sí cuando realmente queremos decir que no puede suponer que hagamos un trabajo mediocre.
- Evita gustarle a todo el mundo. Otro de los errores más comunes que afectan a la productividad es intentar caerle bien a todo el mundo. Es completamente imposible. Cada persona es un mundo y lo importante es ser capaz de trabajar en un entorno de compañerismo y respeto sin necesidad de que todos sean nuestros amigos.
Estos hábitos pueden afectar de forma directa a tu productividad en el entorno laboral. Por tanto, trata de evitarlos.
